Estimadas familias:
El inicio de este curso ha estado marcado por incidencias que nos han hecho reclamar a la Consejería de Desarrollo Educativo de la Junta de Andalucía que se comprometa a garantizar una educación pública inclusiva y de calidad.
La escuela pública sigue perdiendo peso en nuestra provincia, como en el resto de Andalucía: El cierre continuado de unidades en nuestros centros supone derivar alumnado a centros privados concertados y superar la ratio en muchas aulas.
La escuela rural sigue perdiendo recursos y unidades.
La falta de previsión por parte de la Junta de Andalucía hace que el alumnado con necesidades educativas especiales haya empezado el curso sin el personal técnico de integración social (PTIS) necesario para garantizar su asistencia a clase.
El retraso en la contratación de las actividades extraescolares, nos ha dejado a las familias de la pública sin un servicio esencial.
El servicio de comedor está en el aire porque no han sacado la licitación a tiempo y en unos meses se acaba el contrato menor y nos quedamos sin comedores. Los colegios con comedores de gestión directa también tienen problemas por falta de personal.
Siguen sin terminarse las obras en varios centros educativos de la provincia. Tampoco se cubren las bajas del personal de servicios (PAS), dependiente de la Junta. Falta personal administrativo, de limpieza y conserjes.
Cientos de estudiantes se han quedado sin plaza en la Formación Profesional pública. ¡Y nadie asume responsabilidades!
Llevamos un mes esperando que nos reciban en la Delegación territorial de Educación de la Junta de Andalucía. NO NOS ATIENDEN EN LOS DESPACHOS, SOLO NOS QUEDA SALIR A LA CALLE.
Hemos hecho un llamamiento a toda la comunidad educativa, y a la ciudadanía en su conjunto, para que se sume a esta marcha el sábado 21 en apoyo a un servicio público básico para Andalucía como es la ESCUELA PÚBLICA INCLUSIVA Y DE CALIDAD.
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